domingo, 17 de julio de 2011

Colaboración solidaria – Héctor Ranea


Adiviné que se pondría la camisa que le regalé para su último cumpleaños. Sin nada al cuello, claro. También supe que le sería difícil subir hasta ahí, por lo que dejé una banqueta suficientemente fuerte, para que no caiga de antemano. La soga la preparé con dedicación y amor, ella la vio y no pudo resistirse. Yo no sabía que se estila sacarse los zapatos, pero creo que a esa conclusión no le fue complicado llegar, siempre tuvo recursos técnicos. Escuché un golpe, emitió un rezongo con ronquido. Cuando termine de sacudir las piernas, la bajo. ¿Qué menos puedo hacer por ella?

Sobre el autor: Héctor Ranea

Imagen: Nature hurt, de Adjisketcherromance en deviantArt

3 comentarios:

Javier López dijo...

Con personas tan solidarias y amorosas como el personaje de su cuento, el mundo sería otra cosa, Héctor.

Javier López dijo...

Mariano, me alegra mucho que te guste el contenido de este sitio, lo cuál no es nada de extrañar.
Lo que sí te agradecería es que no nos envíes una URL con tus comentarios, puesto que, de ser así, lo consideraremos spam a partir de este momento.
Gracias.

El Titán dijo...

spam claro como el nilo...
en cuanto a lo importante, es decir el texto, no puedo dejar de pensar que con verdugos así vale la pena morir...