miércoles, 26 de noviembre de 2008

El perro que aprendió a hablar - Guillermo Marín


EL PERRO QUE APRENDIÓ A HABLAR
Guillermo Marín

CIUDAD DEL CABO, 17 de noviembre, Reuter. Un profesor de idiomas le enseñó a su perro a hablar porque leyó en un cuento de Benedetti que un hombre había aprendido a ladrar. “Viceversa fue mucho más fácil”, confesó el catedrático. “Además, la pronunciación del castellano no le trajo al animal picazón alguna en la garganta como le dio al principio el francés y el alemán. Las lenguas guturales traen molestos comezones en el aparato fonatorio, por lo cual, y dicho sea de paso, ya no hay nada que nos diferencie de las bestias”, concluyó el profesor.

4 comentarios:

Ogui dijo...

Ojalá! Me parece que el profe es medio optimista... Buenísimo!

G.F.M. dijo...

Ogui: Qué bueno lo que decis!! Gracias. Un fuerte abrazo.

Florieclipse dijo...

¿De qué raza era el perro? ;)

G.F.M. dijo...

Florieclipse: El perro es un Tekel, vulgarmente conocido como “perro salchicha”. Aquí, en Argentina, los estamos entrenando para putear a los políticos y demás imbéciles. Aun no hemos pensado importarlos. Cordiales saludos.